Incautan cerca de 10.000 galones de combustible ilegal en Papallacta y reavivan alerta por redes criminales
Un nuevo operativo ejecutado en la parroquia Papallacta, cantón Quijos, dejó al descubierto la magnitud del transporte ilegal de hidrocarburos en la Amazonía ecuatoriana, una actividad que no solo representa una grave pérdida económica para el Estado, sino que también está directamente vinculada a estructuras delictivas y economías criminales.
Durante un patrullaje preventivo, la Policía Nacional del Ecuador aprehendió a un ciudadano que transportaba aproximadamente 10.000 galones de hidrocarburo sin los permisos correspondientes, utilizando un tractocamión y un tanquero, ambos retenidos como indicios del presunto delito.
Además del combustible incautado, las autoridades decomisaron un dispositivo móvil, elemento clave que podría aportar información relevante para determinar si este hecho responde a una operación aislada o forma parte de una red organizada dedicada al tráfico ilegal de combustibles, práctica que suele alimentar actividades como la minería ilegal, el contrabando y otras economías criminales en la región.
🔎 Un delito que va más allá del transporte
Expertos en seguridad advierten que el tráfico ilegal de hidrocarburos no es un delito menor, sino un eslabón estratégico dentro de cadenas criminales que requieren grandes volúmenes de combustible para operar. La Amazonía, por su ubicación y conectividad vial, se ha convertido en un punto sensible para este tipo de delitos.
El caso vuelve a poner sobre la mesa la necesidad de controles más rigurosos, seguimiento a las rutas de transporte pesado y una coordinación permanente entre instituciones para evitar que estos recursos terminen financiando actividades ilícitas.
Las investigaciones continúan para establecer responsabilidades y posibles vínculos con organizaciones delictivas.
